sábado, 11 de septiembre de 2010

CLAVE

Se abruma mi mente de recuerdos, anécdotas y pasado cuando escucho una canción.
Sin embargo, no es algo que pasa siempre. Es una cantidad de factores determinados que se juntan en mayor y menor medida y hacen brotar la angustia, la nostalgia, y la impotencia.
Basándome en lo que dicen, mi capacidad de amar más allá de todo está completamente sin desarrollar. Pero basándome en mi propia teoría puedo dar la certeza de que así fue, es y será de infinito mi amor por vos.
Porque no puedo explicarlo, porque hay cosas que no puedo hacer ni decir sin que se me haga un nudo en la garganta, porque así de inexplicable se ve de afuera (aunque poco me importe).
Esos son los fundamentos de mi teoría. Sin menospreciar claro, a todos aquellos que viven y encaran desde otro punto de vista este tipo de situaciones.
Y en el afán de querer explicar porqué es esto tan intenso, porque me pasa esto que me pasa cuando trato de recordarte y de asumir que no estás, me pierdo en un mar de dudas, en un entrevero de palabras enredadas y confusas que ni yo termino de entender.
Hoy puntualmente de los jazmines que cortaba la abuela, después mamá, para llevarles y que adornen por unos días los escritorios. Eso es puntualmente de lo que me acuerdo hoy. Así como también de aquellas cosas increíbles, que yo no me imaginé que podían llegar a pasar algún día, y se que vos desde arriba ALGO tenés que haber hecho, porque tiene TANTO que ver con vos.
Porque quizás no haya ningún día de mi vida en el que pueda lograrlo. Pero hoy, quiero decirte gracias, y que tengas presente, que llorarte y extrañarte no significa bajo ningún concepto no dejarte ir en paz.